En un café acogedor, un grupo de amigos, todos en sus veintes tempranos, se reunieron alrededor de una mesa, riendo y charlando mientras se turnaban para hacer sus propios calzones, con una variedad de toppings y rellenos extendidos ante ellos, desde opciones clásicas como jamón y queso hasta opciones más aventureras como espinacas y feta.

Una tarde soleada y clara en un pueblo español, con un grupo de chicas de 10 a 12 años sentadas en un círculo, aprendiendo el arte de hacer calzones de la mano de su abuela anciana, que les enseña las técnicas y secretos tradicionales transmitidos a través de generaciones, mientras se ríen y charlan, rodeadas del aroma de pan recién horneado.

Un grupo de chicas jóvenes, vestidas con trajes coloridos, se reunieron alrededor de una mesa, ansiosas por aprender a hacer calzones tradicionales españoles, con harina y queso esparcidos por la superficie, y una gran sonrisa en cada una de sus caras, mientras se turnaban para amasar la masa y agregar sus rellenos favoritos.