Una niña joven se representa en un traje tradicional mexicano, sosteniendo un escoba y un cubo, con una sonrisa suave en su rostro mientras limpia con precisión el suelo, simbolizando la importancia del trabajo doméstico y la belleza de la vida cotidiana.
La muchacha que limpia la habitación de un niño, con juguetes y ropa esparcidos por el suelo, y una cuna en el rincón, con una luz suave y cálida.
La muchacha que limpia la cocina con una toalla en la mano, rodeada de utensilios y platos sucios, con un fondo de azulejos y una mesa de madera oscura.
La muchacha que limpia la casa con una sonrisa en su rostro, mientras el sol brilla a través de la ventana, ilumina la habitación con un toque de calidez.